por Analía Lorenzo (desde México DF)
En la esquina izquierda del techo de mi habitación, a más de tres metros de altura, justo sobre mi cama aunque por suerte del lado de los pies, pero arriba, vive un alacrán. Se esconde en una endija del techo de ladrillos. La otra noche salió. Era madrugada y yo había bebido. Pero la gata insistía en mostrarme algo. Los gatos son insistentes. y miro para arriba y ahí estaba. Dudé si era escorpión o alacrán, resolví que era alacrán. movió la cola, precioso. Fue un ratito, había luna llena, y se volvió a meter a su cueva.
A las horas, lo volví a ver, como caminando, pero no doy fe. la cosa es que el alacrán vive en ese lugar desde hace mucho más tiempo que yo. Me lo dijo Yareni, mi vecina, que vivía antes acá. Pero, también dijo, se pone viejo y puede caerse
¿Se mareará un alacrán?