
«Ahora en Tucumán les dio una paliza un gobernador indefendible, y con un candidato que no enamora. Pero les ganó con votos y por lejos, y eso los enloqueció y ahí andan recurriendo a jueces serviles, jurídicamente ignorantes», plantea Mempo Giardinelli en esta nota.
«La cuestión tucumana, digámoslo, está siendo un intento de golpe. No gusta que se diga, pero fue así nomás: otro de los tantos impulsos golpistas que un oposicionismo desesperado procuró por diversas vías en los últimos años, por lo menos desde la llamada “crisis de la 125”, en 2008. Lee el resto de esta entrada »