
» La derecha no se va a restringir en el uso del poder y lo hará con la impunidad que le conceden la corporación judicial y la corporación de medios que operaron estos doce años en contra del kirchnerismo», plantea Luis Bruschtein en esta nota.
«El acto masivo, inapelable, del miércoles en la Plaza de Mayo fue más que una despedida a Cristina. Hubo una señal de fuerza al macrismo, un recordatorio de que ganó solamente por algo más de dos puntos de diferencia. También fue reafirmación de un liderazgo ante cualquier cuestionamiento futuro. Fue un acto limpio, con poco aparato y mucha gente que participó sin encuadramiento. El kirchnerismo aprendió de las elecciones: la militancia no tiene que obturar la participación, sino facilitarla. Lee el resto de esta entrada »