
«La denuncia de la corrupción ha sido el argumento central para oponerse a todos los proyectos para democratizar, modernizar y agilizar la Justicia», plantea en esta nota Luis Bruschtein.
«Todas estas normas, las que quedaron del proyecto de democratización de la Justicia, la reforma pendiente del Código Penal, la reforma y unificación de los códigos Civil y Comercial y la actual reforma al Código Procesal Penal implicaron grandes procesos de debate con movimientos sociales, de género, pueblos originarios, sin tierra, campesinos, desocupados, estudiantiles, de derechos humanos, centrales obreras, asociaciones de profesionales y ONG, además de políticos de la oposición. Lee el resto de esta entrada »