Mama, yo quiero un novio que sea milonguero, guapo y compadrón, de los del gacho ladeado, trencilla en el pantalón, que no sea un almidonado con perfil de medallón. Mama, yo quiero un novio que al bailar se arrugue como un bandoneón.
Tu donación servirá para seguir sosteniendo un periodismo sin fines de lucro.
Debajo del título principal te explicamos cómo hacerlo.
Muchísimas gracias.